Has rechazado las cookies. Puedes reconsiderar esta decisión

You have allowed cookies to be placed on your computer. This decision can be reversed.

IV Congreso Internacional de Humanidades Digitales, con la FIL y DIGIBÍS

 

Foto. Mesa de ponentes

Organizado en Toledo por el catedrático Dr. Miguel Hernando de Larramendi de la Universidad de Castilla-La Mancha y miembro del Patronato de la Fundación Ignacio Larramendi tuvo lugar un panel en el que, bajo el título de Las bibliotecas virtuales, la información bibliográfica etiquetada y las humanidades digitales, tomaron parte Francisca Hernández Carrascal, consultora de DIGIBÍS, Patricia Juez García, técnico de proyectos de la Fundación Ignacio Larramendi, junto con la catedrática de la Universidad Complutense profesora Dra. Amelia Sanz y el profesor Dr. Daniel Riaño del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.

La intervención de Francisca Hernández se centró en primer lugar en las aportaciones de Ignacio Larramendi, quien instituyera esta Fundación, a la digitalización y contenidos a través, primero, de los Clásicos Tavera de la Fundación Tavera y, en segundo lugar, con la Biblioteca Virtual de Polígrafos. De hecho, se dio la coincidencia de que justamente 20 años antes se había presentado el Menéndez Pelayo Digital en la Cátedra de la Biblioteca del autor cántabro en Santander, un mes después se presentó también en la Hispanic Society de Nueva York y en la Biblioteca Nacional del Museo de Antropología e Historia de México.

Francisca Hernández detalló que la codificación que se utiliza en los buenos proyectos normalizados de digitalización de bibliotecas están basados en el estándar ALTO, respaldado por la Library of Congress, y dado que ese estándar está basado también en XML es factible sin grandes problemas informáticos, siempre que se realice un buen análisis previo, mapear los contenidos al estándar de humanidades digitales TEI.

Patricia Juez se centró en la evolución de las Biblioteca Virtuales en España y en el mundo con una fuerte normalización. Citó la Biblioteca Virtual de Polígrafos, que es caso de estudio del W3C y de Europeana. Con el mismo software de esa Biblioteca se han implementado más de 50 bibliotecas virtuales o digitales en España, desde la Biblioteca Virtual de Andalucía hasta la última, que es la Biblioteca del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid, pasando por la Biblioteca de la Real Academia de la Historia y las dos implementadas en el Ministerio de Cultura, la Biblioteca Virtual de Prensa Histórica y la Biblioteca Virtual de Patrimonio Bibliográfico, así como algunas de las que se han desarrollado en las Comunidades Autónomas todas ellas recogidas por el Directorio Nacional de Recursos Digitales HISPANA. Como hemos dicho, todos estos proyectos se han implementado a partir del software de la Biblioteca Virtual de Polígrafos, desarrollado por la empres filial de la Fundación Ignacio Larramendi, DIGIBÍS.

La Dra. Amelia Sanz, que es la primera catedrática que tiene denominación como catedrática de Humanidades Digitales, centró su intervención en repasar los retos y desafíos que las bibliotecas virtuales van a ser capaces de solventar para los humanistas digitales. En el animado debate que siguió a las intervenciones tomó la palabra varias veces el director técnico de la Biblioteca Nacional, un consumado especialista en el desarrollo e implementación de bibliotecas virtuales, como prueba la Biblioteca Digital Hispánica y la Hemeroteca Digital Hispánica.

Por último, el doctor Daniel Riaño, que recordó a Xavier Agenjo en su doble faceta de humanista y bibliotecario digital, se centró en la aportación que podrían hacer las bibliotecas virtuales a la hora de dar soporte y preservación a proyectos de Humanidades y, en concreto, los corpus que está desarrollando el Consejo Superior de Investigaciones Científicas en el Área de Filología Clásica Griega. Al igual que la doctora Sanz, el profesor Riaño es el primero que tiene en el CSIC denominación, como investigador titular, de Humanidades Digitale

Últimas noticias